23.12.05

Fiestas

Hola gente!

Cómo se están preparando para las fiestas?

Yo no me estoy preparando, no se si es que no tengo fuerzas o no tengo ganas o qué me está pasando, pero no estoy ansiosa por reunirme con la familia, brindar, y mucho menos eso de todos con la copa en la mano esperando escuchar en la radio la sirena que dice que se terminó el año. Es más, esa sirena siempre me dio miedo, es como la que anuncia el bombardeo en las películas, siempre espero q caiga la bomba encima del living y nos haga puré a todos, solo por un instante, antes de empezar a saludar a los parientes.


Desde hace un tiempito incorporé una costumbre para estas fiestas, y es decirle a los integrantes de mi familia, en ese ratito de brindis y saludo, que los quiero mucho, y darles un abrazo de oso.
Incorporé eso hace un par de años, cuando mi abuela paterna todavía estaba con nosotros, un día pensé "y si se va sin que yo le diga todo lo que la quiero?". Y fue así que perdí el miedo a decir "te quiero mucho", y cuando lo digo, es con esa emoción que hace brillar los ojos.

Pero este año no tengo muchas ganas de payasear y alegrar a todo el mundo, tampoco tengo ganas de mandar mails y más mails con buenos deseos, no porque no le quiera desear cosas lindas a nadie, sino porque de verdad estoy cansada. Y mucho menos que el año nuevo empiece como el primero sin mi abuela: mientras todos brindaban y estaban felices porque estábamos juntos, yo estaba con mis ojos hinchados desde hacía horas, moqueando por no tener a mi abuela y por todo lo que me estaba saliendo mal.


No quiero que mi 2006 empiece así. Y como soy recicladora y guardo todo, les pego un mensaje que mandé hace unos años, un año que estaba con todas las ganas que me faltan ahora:


Qué la Nochebuena los encuentre rodeados de todos vuestros seres queridos, brindando con lo que sea que tengan en las copas, vasos, botellas, etc etc etc, teniendo esa sensación de paz y de regocijo que siempre se hace presente en esta noche, y que, como cuando éramos chicos, la Nochebuena sea una noche llena de magia, llena de esa ansiedad por ver a Papá Noel pasando por el cielo con su trineo y las ganas de que se haga de día para ver qué nos dejó en el arbolito. Y que el regalo más grande que encuentren sea justamente la magia de estar reunidos con nuestros seres queridos, todos felices y con la esperanza de un futuro mejor chisporroteando por todos lados.
Sean felices.

Abrazo. Fin del post.

16.12.05

Jueves de Salitou: una serie de eventos desafortunados



Y si, vi la peli y me gustó, porque me gustan las películas para chicos, para chicos y grandes, para grandes, me gustan las películas.

Mi serie de eventos desafortunados comenzó ayer a la noche, cuando dije "mañana tengo que madrugar, pedí el turno con el médico hace un mes, y el anterior lo perdí por confundirme de día, ya hace dos meses que vengo pidiendo turnos y nada, me baño antes de irme a dormir y duermo vestida, por las dudas" y llamé a mi viejo para que me llame a la hora que se prende mi televisor, que como despertador no sirve, ya que incorporo lo que escucho en mis sueños de la mañana.

Llegó el momento de desconectarme y apagar la pc, y preparé todo para el baño. Si, necesito prepararlo, nada de entro y digo "oia, ducha" y resuelvo todo en el momento.

Y como siempre, empecé a dar vueltas, mientras buscaba las cosas en el dormitorio prendí la tele, estaban dando una película, y me senté en la cama para verla. Pensé en aprovechar el tiempo, y me apliqué una mascarilla tipo peel-off, nada más porque me encanta el momento de sacarla tirando de los bordecitos (que feo suena eso fuera de contexto). Puse la almohadilla térmica en mi cintura y me enganché viendo la película. A eso de las tres de la mañana desenchufé la almohadilla, me saqué la máscara y pensé que mejor a dormir y dejar de perder el tiempo. Me metí en la cama y empecé con el zapping. Tipo cinco de la mañana apagué el tele y me dormí, dos horitas y media de sueño son mejor que nada.

A las dos horas, me despertó un lindo calambre, me estiré la pierna y me volví a dormir. Me llamó mi viejo, y di las vueltas acostumbradas: arrastrarme al baño, pensar que todavía estoy durmiendo porque tengo sueño, volver a la cama, volver a dormir.

Me desperté una hora antes de mi turno al grito de "no se dónde están las radiografías!" y empecé a buscar como desesperada.
Shit.
Cuando las encontré, me di cuenta que tampoco sabía dónde estaba el papelito del turno (con la dirección) y no recordaba ni por asomo el nombre del médico, así que lo llamé a mi viejo para que en operación comando me consiguiera la dirección con la obra social, mientras me metía en el baño.
Tardé diez minutos más de lo habitual, la ducha siempre me obliga a meditar y pierdo la noción del tiempo, y salgo confiada pensando que en diez minutos de taxi llego, me quiero conectar al laburo porque en la agenda de allá me anoté el turno, para ver el nombre del médico, y me falla la conexión constantemente.
Shit.
Llamo a mi viejo, me da la dirección, preparo todo y cuando agarro la billetera me acuerdo que la noche anterior pagué yo la cena, y mi hermano me quedó debiendo la mitad, y no me quedaba un solo billete.
Shit.
Camino a toda la velocidad que me permitía mi pierna izquierda, un poco más corta que la derecha por culpa del calambre, y llego al cajero automático. No tenía cambio.
Shit.
Voy al cajero de al lado, pensando "tu tienes cambio, di que si di que si di que si", y me dijo que si, y salgo y justo en ese momento no se veía un solo taxi libre por Corrientes, faltaban cinco minutos para mi turno.
Shit.
Entonces estiro la mano y de atrás de un colectivo aparece un lindo taxi que para. Bingo! Pero cada vez hay más autos en Buenos Aires, y el viaje se hacía laaaaargo, y mucho más sabiendo que era tarde.
Shit.

Final feliz? Sisisisisisi :)

En el camino, encontré el papelito del turno, con la dirección, que coincidía exactamente con la que me había pasado mi viejo (no siempre se produce esta coincidencia). Llegué quince minutos tarde, y el médico me atendió igual, y no me retó por llegar tarde, y tenía buena onda, y escuchó todo lo que el dije, y me contestó todas las preguntas, hasta las que me olvidé de hacer, y me dió una orden para un estudio, y fui a sacar turno, y lo conseguí para el sábado, y no solo eso, sino que en lugar de darme un turno para volver a ver al galeno dentro de un mes, lo vuelvo a ver el próximo lunes.

Fin del post.

4.12.05

Fin de semana


Otra vez no tengo ni p*t* idea de qué escribir, y tengo muchas ganas, de verdad, así que les voy a contar cómo fue mi fin de semana de larva, otro más.


El viernes me quedé con sed de magia cuando terminé de ver La comunidad del anillo, y me autoprometí a mi misma (redundo para que quede clarísimo) regalarme un fin de semana de la historia completa, versiones extendidas.

El sábado tenía una comunión, se vinieron mis viejos a buscarme, y llegó mi hermano, y tuvimos un pequeño altercado. La convivencia es difícil, mucho más cuando las personas que la practican se aguantan porque son de la familia, y tienen más rollos que ciento cincuenta ventanas con persianas. A veces me pongo a pensar si la gente es tan sorete como yo creo, o si mi estado de ánimo me predispone a exagerar la pequeña soretez que todos llevamos dentro y vivo en la ilusión (ilusión como alteración de la realidad) de que estoy rodeada de monstruos materiales, insensibles y egoístas.

Después de varias insistencias progenitoras y un intento fallido de arruinar un maquillaje casual arruinado por las emociones que no deberían salir por los ojos, me puse los lentes de sol para cubrir mi persona y fui a la comunión.

Los chicos, de verdad que le ponen pilas a todo. Como no conocía a nadie, no por no haberlos visto nunca, sino porque me cuesta horrores registrar a la gente, me limité a saludar, sonreír y hacer de vez en cuando algún mínimo chiste carente de contenido. Pero no estaban los ánimos para eso, y los ánimos familiares pasaban de "hace mucho que no te vemos" (ni un "qué linda que estás", puta madre) a un "tenemos que conseguirte un novio, cuál te gusta", como si estuviera en un supermercado lista para agarrar a algún caballero, meterlo en el changuito y enfilar para la caja.

Como no me decidía y mi "si es mayor de 25 no me interesa" no sirvió de nada, ellas decidieron que el indicado era el de barba, quizá porque era el que les gustaba a ellas y como no podían echar mano en el asunto querían que alguien más lo hiciera en su lugar.

Mamá escuchó el comentario y se convirtió en Sylvia Fine, y dijo que le gustaba, que lo afeitaría y le cortáría el pelo, que ya había estado hablando en la cocina, diciéndole que servir café con un termo de bomba era como ordeñar un termo, y yo ahí en el medio, con más ganas de tomarme un remis a Ezeiza que de andar de levante en una comunión.
Empecé a pensar en por qué no estaba en una comunión en algún país con atentados terroristas como asaltos hay acá, nada más que para que cuando entren los encapuchados con armas largas salir al grito de "llévenme a mi!".

Pero sobreviví, no se me cayó la careta aunque brindé con champagne. Les hice chistes a los chicos, siempre se maravillan con mis ocurrencias, y esta vez le tocó el turno al método para hacer un "pequeño globo babeado" con los restos de los globos reventados a propósito.

Después, me despedí de mis progenitores, que se retiraban a su hogar, y me quedé con mi prima, compañera de salidas, llantos por proyectos fallidos, depresiones y alegrías. Una auténtica amiga, y encima de la familia. Fuimos a lo de los viejos de ella, mis tíos, disfruté un rato de felinidad con Ulises y un cachito de lana, y pude observar como eso de que la distancia mejora las cosas es cierto y pasa en todos lados. Caida la noche nos fuimos para el departamento donde vive desde hace poquito, y me convidó con su alegría de haber dado el tan necesario paso. Me contó historias de su trabajo, de gente, y yo le cebaba mate mientras le tejía una agarradera y me limitaba a decir "cuando vi por primera vez ese video empecé a mirar a los pelados de una forma diferente".

Pobre, se bancó mi ausencia total de onda, ni de la buena tenía, y encima me prestó un cacho de cama, colchón de resortes para hacer las delicias de mi espalda, que me hizo mal y sin embargo la quiero.

A la mañana, madrugar, ella tenía cosas que hacer y yo me iba cuando ella se iba. Y a hacer tiempo, para volver a casa a la hora que dije y no ver nada que no quiero ver.

Me compré una de las dos revistas femeninas que compro todos los meses, de esas que están llenas de gente linda como no soy ni nunca voy a ser pero no me importa porque soy linda a mi modo y si a alguien o le gusta que mire para otro lado, llena de perfumes que compraré con cuentagotas y cuotas con tarjeta, cosméticos que hacen magia y arruinan economías, y ropa linda que estoy decidida a imitar con hilados y crochet.

El colectivo tardó la eternidad habitual en aparecer y la eternidad habitual en llegar a la parada donde me bajo, pero me quedaba una hora y media todavía para dar vueltas. Venía derechito a sentarme en la puerta de mi casa, leer la revista ahí, cuando me decidí a regalarme un momento para mi, y me fui a desayunar. Café con tostadas y revista. Y me acordé de mis idas al cine sola, y cuánto las disfrutaba, y me regalé no una hora y media, sino dos, desayunando conmigo, ahí al costado de la vidriera del café, para que la gente me vea disfrutar de mi revista.

Volví, chateé, compartí la emoción del deber cumplido y del éxito alcanzado gracias a la generosidad de los demás, generosidad contagiosa, y de planear un encuentro de fin de año.

Y después me tiré en sillón, me tapé con una manta y dormí la siesta más larga de mi vida, todo el santo día mezclando diálogos de películas con sueños, un poco más de magia para el fin de semana, y todo lo que tenía que hacer no lo hice, otro fin de semana al pedo, otro fin de semana de larva.

Me tomo un té dormitivo, y me voy a dormir temprano, tengo ganas de pasear con capa, capucha y bastón por un bosque brumoso, hacerme amiga del Señor de algún río, por qué no de dragón, y prestar algo de mi magia y mi espada a la causa justiciera de algún caballero de noble linaje e igualmente nobles intenciones.

Abrazo de oso polar de Coca Cola.

Fin del post.

2.12.05

Se perdió la Magia?

Llego a casa y no tengo nada que hacer. Salir? No tengo ganas. Ya leí todos mis mails, si, de todas mis cuentas, ayer aprobé el examen que tenía que rendir y hasta el lunes no tengo el material para estudiar para el siguiente. Decido ver televisión, me fijo en la programación: La comunidad del anillo. No hay mucho que pensar para decidir. Empieza, la música me vuelve a pegar en el plexo solar, un río de hielo me recorre la columna vertebral y se extiende por mis nervios, hasta la punta de los dedos de las manos y los pies. Mis ojos se llenan de lágrimas y clavo la punta de los dedos en un almohadón, esperando. Hacía mucho que no sentía esto, adoro esa historia, adoro cómo esas palabras se meten por mis ojos y me transportan a ese mundo de fantasía, donde el mal y el bien están tan bien diferenciados, donde hay lugar para héroes, heroínas, seres que sufren de formas que no podemos imaginar, otros que son felices y su felicidad es algo tan natural que no deja lugar al sufrimiento. Pero ya no es lo mismo que la primera vez. La magia que sentí y viví cuando leí los libros por primera vez ya no está. Es una historia cruel, me lleva a lo largo de tantas páginas a un mundo en el que me gustaría estar, para abandonarme al terminar la última página del último libro. La historia se terminó y punto, ya no hay más, tengo las manos, el corazón, el alma y los ojos vacíos de toda esa magia. La magia original, que me dibujó sonrisas y me arrancó lágrimas. La magia original ya no está, en su lugar hay otra, la magia de robar por un rato un pedacito de la vida de esos personajes, sabiendo que se volverá a terminar, y que me voy a quedar otra vez con las manos vacías, que se me va a escurrir entre los dedos, como el agua.

26.11.05

Raúl


Hace un par de años, la vida y un incremento del 20% en mi sueldo me llevaron a elegir el turno noche en mi trabajo. Durante casi dos años trabajé de lunes a viernes de 22 a 7, léase, de martes a sábados.

Una vez, caminando las cuadras que separan el edifico de la parada del colectivo, pasé al lado de una ventana con postigos de esos de metal habitualmente pintados de gris. La ventana tiene como un balconcito, y los postigos estaban abiertos de una forma extraña, como cerrando el balconcito.

En esa especie de "cucha", había un hermoso gato negro y blanco, casi idéntico a Félix. Esos gatos y los gatos totalmente negros son mis preferidos.

Pasé al lado y me miró fijo y me dijo decididamente "miau", como saludando o pidiendo algo. Me acerqué y le hice unos mimos, y así empezó: todas las mañanas yo pasaba por esa ventana y todas las mañanas estaba el gato esperándome, a mi o a alguien que le daría de comer a esas horas.

Un buen día pasa una vecina del barrio y me ve haciéndole mimos al gato y me dice "ya conociste a Raúl" y nos quedamos charlando. Al parecer Raúl había vivido entre la gente, y se ve que en un hogar con chicos, porque los seguía como si fuera un perrito. Era uno de esos gatos que "hablan", mimoso en extremo. La dueña de la ventana lo había llevado a castrar, y una veterinaria lo atendía gratis.

Un buen día le estaba haciendo mimos cuando me di vuelta a mirar algo del otro lado de la calle, y en ese momento Raúl saltó y se me prendió de la remera. Lo agarré para que no se caiga y me arañe en el proceso, y se quedó a upa, quietito, con sus patitas alrededor de mi cuello, como abrazándome.

Fue tan lindo que en cuanto se dejó bajar (se agarraba de mi remera con las uñas) crucé al supermercado de enfrente y le compré una lata de alimento. De más está decir que se hizo costumbre, y Raul siempre esperaba pacientemente en la puerta del supermercado a que yo saliera con la lata de comida.

Raúl era como una mascota con cama afuera, yo quería adoptarlo, pero lamentablemente no puedo tener animales con pelos que den alergia en casa, a mi hermano le hacen demasiado mal.

Le hablé a mi mamá de Raúl, y ella estaba que si que no, que otro gato más no que despues se van y sufro, que bastante tengo con el perro, hasta que la convencí.

Un día que ella volvía de la casa de mi abuela y se bajaba del tren cerca de donde trabajo, nos encontramos en la estación que queda cerca de mi trabajo y la llevé a conocer a Raúl. No estaba. Estaban su cajita y sus platitos en la ventana, pero de Raúl ni noticias.

Como a veces desaparecía por varios días, y otras lo veía durmiendo en algún negocio de la cuadra, no me preocupé mucho, pero nunca más apareció.

Ayer a la mañana pasé por su ventana, y estaba vacía, el postigo cerrado, como si nunca hubiera vivido ahí. Y no se por qué, empecé a extrañarlo horrores. Extraño el diálogo de todas las mañanas:


- Hola Ra!
- Miau!

- Qué lindo que sos Ra!
- Miau!
- Comiste?
- Miau!


Extraño pensar que me esperaba a mi, su costumbre de contestar a cada cosa que yo decía, y su forma de pedir upa, porque eso también se le había hecho costumbre.

Fin del post.

23.11.05

Angel


Me veía de lejos, de espaldas. Estaba frente a ella, diciéndole una a una las cosas que estaba haciendo mal, retándola.
Pero no soy yo, o si? Se ve así mi espalda? No puede ser, esos hombros están más allá de los dos metros de altura. Y mi pelo, larguísimo, liso, negro y al mismo tiempo gris, con reflejos metálicos. No parezco yo, y además vestida de blanco, y de largo, y esas formas que se adivinan debajo de esa especie de.... túnica translúcida... una espalda muy huesuda, y qué largos mis brazos y mis piernas... y mis pies? Por qué veo el piso y no veo mis pies?
Camino alrededor para verme de frente, y me ubico detrás de ella. Qué cara larga tengo, y tan... luminosa? Y esa mirada? Da miedo de verdad, y mis ojos parecen dos huecos, oscuros, grandes, profundos, en medio de tanta luz.
Ella parece tan pequeña al lado de eso que le está hablando... si se me apareciera algo así me moriría del susto. Y parece que estoy enojada, aunque solo mueva la boca para decirle a ella que lo que hace está mal, que no tiene derecho, que no lo siga haciendo.
Y comienzo a ver a través de esos ojos profundos (mis ojos), y veo la cara de ella, el pánico que muestra su cara hace que las de películas de miedo parezcan un chiste.
Y escucho su voz, temblando de terror, como si creyera que el poco aire que le queda no le fuera a alcanzar para completar la pregunta: "qué sos?".
Y siento su miedo, porque se convierte en mi miedo y se acelera mi corazón cuando esa voz (mi voz) que golpea directamente en el esternón como un trueno dice: "ángel".

22.11.05

Licuadora


Estoy en medio de un ring. No un anillo, uno de esos rectangulares donde dos señores de pantaloncillos y manos acolchadas se decoran las caras a golpes.
Estoy en el medio y me rodean mis oponentes: el trabajo, la familia, el dinero, el estudio, uno en cada esquina.
Me miran fijo, serios, esperan que de el primer golpe para devolvérmelo. Pero no puedo, no puedo moverme por más que lo intento. Se que en el momento oportuno, a las corridas y con el tiempo más que ajustado voy a fajarlos a todos, de a uno por vez, pero no puedo anticipármeles.
La semana pasada intenté estudiar para un exámen, leía dos párrafos y se me venía a la mente un tema de trabajo, una discusión imaginada, mi pie posándose triunfalmente en la garganta de alguien. Volvía a leer el último párrafo, y se me venía a la mente un tema familiar, y me quedaba con los ojos fijos en la misma palabra mientras pensaba cómo resolverlo. Un sacudón de cabeza y a retomar la lectura, y un ejército de números seguidos del signo $ y un nudo en el estómago me atacaban.
No se daban cuenta que me estaba peleando en ese momento con el señor estudio? No pueden respetar cada uno su turno?
No, y yo no logro concentrar mi atención en uno solo por vez, tengo que tenerlos a todos en la mira, y así no logro avanzar, sino mantenerme en el medio del ring, que ahora es un
dohyo, y yo estoy en el medio tratando de que no me saquen.
Y un día antes del exámen resigné horas de sueño, le di un par de leídas a conciencia (es decir, con pocas interrupciones) y aprobé, pero a último momento.
Y sigo así, con un cóctel en la cabeza, cada idea, pensamiento, recuerdo, previsión, bronca no descargada o alegría está desarmada en pedacitos, y está todo mezclado.
Sepan entender si entre tanta mezcla se me escapa de vez en cuando alguna incoherencia.

17.11.05

Creamfields 2005

A pedido del público, va el reporte de mi primer Creamfields.

Había escuchado tanto de la del año pasado: "estuvo buenísima, lástima que te la perdiste", "fue increíble", "no podía parar de saltar", "las entradas se terminan al toque de que salen a la venta, apurate", y así.

Este año decidí no perdérmela, quería revivir un poco mis épocas de adolescencia y pogo, ver alguna que otra banda/dj que me interesaba del line up, pero más que nada sentir un poco de esa energía de gente feliz y exaltada y poder decir algo como "ah, si, mortal, fue a la del 2005" cuando alguien me hiciera un comentario, y dejar atrás el "una vez fui a una rave".

Y compré mi entrada, el 17 de octubre. Y el 12 de noviembre, luego de una semana de refrescar mi mente con un poco de cada uno de los que iba a ver, no fuera cosa de que me dieran ganas de cantar a los gritos con todo el mundo y no saber aunque sea un cachito de letra, llegó el momento esperado. Y me preparé la mochila, lentes de sol, algo de abrigo, documentos para demostrar que soy mayor de 18, la entrada (fundamental), dinero, desodorante (la higiene es lo primero), papel y birome para tomar nota (nunca se sabe), y partí en mi "hermanomóvil" en compañía de mi hermano y un amigo (de él).

Llegamos y había gente, mucha gente vendiendo entradas en la puerta, pero yo ya tenía la mía y el que vendía las VIP no quería aceptármela en parte de pago. A eso de las 20 hs, luego de comer un pancho cada uno, para aguantar hasta la madrugada y para vivir la adrenalina de "me intoxicaré?", cruzamos la primer valla. Y vinieron los controles, en uno me revisaron la mochila, al toque compramos una hamburguesa porque nos faltaba adrenalina y la noche era larga, y seguimos, me miraron el documento, me cortaron la entrada, y llegamos al lugar del evento.

Empezamos a armar el itinerario, y apareció más gente, todos amigos de mi hermano, y amigos de los amigos de mi hermano. Conocidos míos? Julieta Fazzari y Juana Repetto, pero ellas a mi no me conocen.

Y empezó el bailongo, me mandé para el Main Stage, que vendría a ser el pasto delante del escenario grande, para ver a Audio Bullys. Y empezó el show, y empezamos a saltar. Después vimos pasar sobre nuestras cabezas una bonita maceta con una planta que a simple vista parecía cannabis, y la gente miraba hacia la planta y aplaudía, así que hicimos lo mismo. Pronto el grupo se aburrió, y quisieron ir a una de las carpas a ver a David Guetta, y allá fuimos todos agarrados de la manito, como en el jardín de infantes.

La carpa era un infierno de gente y aire viciado. Desafiando las leyes de la física entramos y logramos adelantarnos bastante, saltando al ritmo de la multitud. Sonaba lindo, pero faltaba el aire de verdad, compartíamos las botellas de costosa agua (si, costosa, cinco pesos la botella de medio litro) hasta que no aguantamos más y salimos en fila como estábamos.

Fuimos a garronear chicles a la carpa de la marca de chicles, y se sumaron dos personas más. Ahi seguimos con el plan: primero a ver a The Prodigy en el Main Stage, en la mitad, a ver un poquito a Hernán Cattaneo, después, de vuelta al Main Stage para ver a Paul Oakenfold, y terminar con Danny Tenaglia en otra de las carpas.


Fuimos a ver a The Prodigy, y empezó la música, y salté con el resto de la gente, y canté un poquito, y cuando dijeron "vamos a ver a Hernán" dije "nos vemos en la carpa del chicle a las dos". Y se fueron, y me dejaron, y aproveché la libertad de no estar pendiente de separarme de mi grupo y me dispuse a revivir viejas épocas haciendo algo que ya no recordaba "viajar en pogo". Y fui pendeja y salté y salté mientras la multitud saltante me empujaba hacia adelante, y grité levantando mi mano hacia la cámara que pasaba por encima de la gente, y llegué a la valla, y estiré mi manita justo que Keith Flint decide dejar de darle la mano a la gente que estaba agarradita de la valla, el primer extranjero que me hace "ossssoooooo!". Terminó el show y salí de la manada con la euforia de haber disfrutado a lo grande.

Me encontré con el grupo en la carpa de los chicles, repusimos los fluídos perdidos y descansamos un rato hasta el siguiente show.

Llegó el momento y volvimos al Main Stage, y nos metimos entre la gente desfiando nuevamente las leyes de la física. En el escenario, una pantalla gigante con un video, y empezó a sonar despacito, y se empezó a sentir la tensión contenida, y todos todos los que estábamos paraditos nos sentamos (eso fue increíble), y de pronto explotó la música y explotó la multitud en un solo salto, y esta vez no esperé a que me dijeran que iban para otro lado, me dejé llevar y salté otra vez, y sentía la música haciéndome temblar la mochila, el esternón y el ombligo, y avancé hasta que no pude avanzar más, y vi a Paul, muy tranquilo con sus bandejas, mirando cada tanto a la gente, y cuando parecía que se iba a terminar, cuando el silencio se adueñó de la noche, en una de las pantallas de los costados vi que Paul volvía, y sacaba un disco, si, disco, de los de vinilo, y lo ponía en la bandeja, y empezó a sonar U2, lo último, y la masa de gente empezó a saltar otra vez, y yo también, y fue increíble, de verdad.

Y se terminó, y volví a la carpa del chicle, y nos encontramos todos, y fuimos a la otra carpa a ver a Danny Tenaglia, pero ya no quedaban energías, y nos volvimos.

Llegué a las 7 de la mañana a casa, me saqué los restos de maquillaje, lo que me quedaba, y me di un lindo baño para sacarme esa capa de no se qué que se me había pegado por todos lados.

Les paso un breve balance de mi paso por la Creamfields:

  • ofertas de entradas: 16
  • pedidos de entradas: 0
  • tocadas de culo (a mi): 3
  • apoyadas: 2
  • botellas de agua: 2
  • latas de Speed: 3
  • gorras: 1
  • ofrecimiento de pastillas: 5
  • The Prodigy: impresionante
  • Paul Oakenfold: increíble
  • Yo: feliz!!!!!!!!!

Chau. Fin del post.

10.11.05

Dioses en el dormitorio


Cuatro menos cuarto de la mañana y yo sigo frente a la pc. Chateando, tratando de identificar el último pez que me compré, y que no anoté el nombre, buscando algo que se me ocurra en internet, pispiando blogs de otras personas.

Es que acaso el sueño no va a venir nunca? Acabo de bostezar, pero sigo con los ojos como el dos de oro.

Dormir es una pérdida de tiempo. En lugar de estar mirando la parte de atrás de mis párpados o soñando mis clásicas incoherencias, puedo leer, aprender, comunicarme, hacer amigos, pelearme, viajar, soñar despierta, que es algo así como soñar lo que uno quiere cuando quiere y porque quiere.

El cuerpo me pide descanso, esa sensación de calambre que trepa por mis tobillos y frena en la pantorrilla viene cada vez más seguido, y sin embargo mi cabeza está a mil, pienso, busco, investigo, aprendo, me obsesiono.

La otra noche me obsesioné con la sensación de caída cuando estamos a punto de dormirnos. Sinda me había pasado el dato, y no retuve el nombre, solamente sabía que es una especie de epilepsia. Busqué y busqué por horas, y horas, y más horas. Era de día cuando encontré la definición, y empecé a buscar distintas definiciones. No me acuerdo el nombre, porque pasó a segundo plano cuando me enteré que en realidad el nombre lo recibe un sacudón del cuerpo, la caída está entre ese sacudón y dormirse.

Pero dormirme no es algo que tenga ganas de hacer ahora, dormir me da dolor de cabeza, de espalda, y cuando empiezo a dormir, no me puedo despertar.

Entonces pienso debería estar en brazos de Morfeo, y me lo imagino en mi dormitorio, en la cama, llamándome con los brazos abiertos. Pero dudo si es Morfeo o es Orfeo, y afortunadamente está la Wikipedia, y me aseguro que es Morfeo, y para mi alegría descubro que Morfeo es el creador de los sueños y no el dios del sueño, porque me suena más al dios de la cena. El dios del sueño, o sea, del acto de dormir, ese es Hipnos, y ahí me engancho con la mitología griega, y me imagino que el que está en mi cama es Hipnos.

La Wiki me dice que "En la mitología griega, Hipnos era la personificación del sueño. Era hijo de Nix, la noche, y hermano gemelo de Tánatos, la muerte no violenta". Entonces pienso que mejor que esté solito en mi cama

Y sique la Wiki: "Su palacio era una cueva oscura donde el sol nunca brillaba. A su entrada crecían amapolas y otras plantas hipnóticas. Según algunas fuentes, vivía junto con Tánatos en un palacio subterráneo cercano al de Nix. Según otras, lo hacía en una cueva bajo una isla griega, a través de la cual fluía Leto, el río del olvido". Y me imagino que debe tener una cama más comoda que la mía, y que las amapolas son re lindas, mejor sería irme para lo de Hipnos, que seguro tiene mucha plata porque tiene palacio, aunque sin sol.

"En el arte Hipnos era retratado como un hombre joven desnudo y con alas en los hombros o las sienes."Apa, desnudo, con plata y me llama desde mi cama, esto se pone interesante.

"A veces es representado como un hombre dormido en una cama de plumas con cortinas negras a su alrededor". Sisisisi! Este es mi modelo preferido de cama! Siempre quise una con cortinas, bien grande como para pasear abajo de las sábanas. Me voy derechito a lo de Hipnos. Espero q la cama sea grande grande, me gusta dormir en el medio, y si hay más de uno es incómodo.

"Sus atributos incluyen un cuerno de opio inductor de sueño, un tallo de amapola, una rama de la que gotea el rocío del río Leto y una antorcha invertida." Viene con cuernos? Chan :-

"Morfeo es su principal ayudante y evita que los ruidos le despierten". Ah bueno, esa no me la esperaba. Así que además de Hipnos tengo también a Morfeo, y los dos me están llamando, desnudos, en mi cama, Hipnos se va a dormir y Morfeo no, Hipnos tiene cuernos...

Too much. Me voy a dormir (me llaman).

Fin del post.

5.11.05

Maldita necesidad


Qué pasó? Me abandonaron las palabras? La maldición del poeta volvió a atacar?

Nop, este no es un caso de falta de palabras, justamente eso es lo que sobra, lo único que falta es orden y coherencia, todas se matan por salir del agujerito del que salen los nervios que hacen que mis dedos se muevan (si, ya se que mis dedos son movidos por músculos, pero quién les dice que se muevan?), y bueno, pasa lo que pasa siempre, el agujerito es chiquito, las palabras son muchas, se traban, no dejan salir, empiezan a empujar, hacen presión, el agujerito no cede, no se agranda, y duele la cabeza, y mejor me voy a dormir que a lo mejor "mañana" salen.


Y bueno, pasaron muchos "mañana", y el agujerito no se agrandó ni un micrón, las palabras se pusieron de acuerdo y empezaron a salir en fila, como corresponde, y con un aceptable nivel de coherencia.


Y tanta introducción solamente para decir algo que no me gusta decir: odio necesitar ayuda. Me acostumbré a enfrentar sola mis problemas, a buscar yo sola las soluciones e inventarlas cuando no existen.

Y llegó el día en el que, ante la pregunta de "necesitás algo?" tuve que decir que si.

Y me dio bronca, mucha bronca.

No se si por tener que guardarme el nograciasyopuedosola o por eso de no querer joder a nadie, porque de verdad me jode saber que estoy molestando a alguien, y no porque cuando a mi me pidan algo me estén molestando (ojo que tampoco sufro del sindrome de Chapulín Colorado), pero eso de necesitar ayuda, y no una vez, sino varias veces, y todas juntas, me hizo acumular una cantidad de bronca increíble, al punto de que se me trabaron todas las palabras en el agujerito ese que ya mencioné.



Y me senté varias veces frente a la pantalla, con el form de un nuevo post en blanco, y ni siquiera aparecía el título, lo más que apareció fue el Pitufo Gruñon que adorna este post, y si va un pitufo no puede faltar mi adorado Azrael, así que también va, y muchas veces porque me encanta, y aunque solamente pegue porque es un poco gruñón, a su felino modo.

Y bueno, el asunto ya pasó.
Ya puedo volver a decir "no, quedate tranqui, estoy bien, yo puedo sola".

Y si me vuelve a pasar eso de necesitar ayuda, ahora que tuve que pedirla y aceptarla, que pasará?

Seguro que lo mismo.

Fin del post.

27.10.05

Deja vu

Este si que fue raro, les cuento.

Mi viejo encontraba una carpeta, supuestamente de alguien relacionado con la política, y me llamaba al trabajo para contarme.

Yo, más paranoica en el sueño que en la realidad, salía de raje porque seguro que el teléfono estaba intervenido.

La cuestión es que por esas cosas locas de los sueños, mi trabajo quedaba exactamente donde está la escuela donde hice la primaria, a tres cuadras de lo de mis viejos. No es que trabajara en una escuela, sino que la oficina estaba ahí. Es más, mi trabajo era el que hacía antes de mi trabajo actual.

Llegaba y con mi viejo y examinábamos la carpeta, no tenía nada extraordinario, era una de esas carpetas forradas en tela plástica, azul, muy prolijita, con tres anillos. Pero al desarmar una de las tapas encontrábamos papeles con cosas comprometedoras (ni idea de qué decían) y negativos de fotos.

Ahí me agarraba el pánico, mal, y le daba a mi viejo instrucciones precisas para destruir la carpeta de modo que nadie que revisara la casa o la basura se enterara que alguna vez estuvo ahí, y buscábamos un lugar para esconder lo que habíamos encontrado. Mi vieja, a todo esto, estaba en la cocina, como cuando era chica (yo, obvio) y se hacía de noche, y mi vieja hacía la comida porque estaba por llegar mi viejo del trabajo, y ni se enteraba de lo que pasaba.

Después le decía a mi viejo que no le comentara a nadie, ni a mi vieja, y me volvía al trabajo, porque estaba tardando mucho y podían sospechar.

Salía de lo de mis viejos, iba para el trabajo y cuando llegaba a la esquina me venía un tremendo deja vu con un sueño que tuve una vez (posta, en el sueño experimenté la sensación del deja vu), y se cortaba la luz en toda la manzana (otra vez un deja vu de aquellos).

Ahí me agarraba el pánico, se cortó la luz por más o menos diez minutos, y quedé como congelada, no sabía si volver al trabajo o a lo de mis viejos.

Al final salí corriendo para lo de mis viejos, y empecé a tocar el timbre, pero nada, no salían.

Y con la fea sensación de que había pasado algo, me desperté.

24.10.05

El regalo perfecto


Qué regalamos cuando regalamos algo?

Les cuento que para mi lo de regalar algo es un trabajillo, y además me gusta. Por lo general trato de imaginarme qué le podría gustar a la persona, conociéndola un poco, viendo cómo es su ambiente, su ritmo de vida, de todo un poco, y cuando voy a comprarlo, trato de pensar en esa persona y buscar lo que a mi me gustaría si fuera esa persona, y que se ajuste al bolsillo por supuesto :P

Otra cosa muy importante también es el envoltorio, y acá depende de dos factores clave: el destinatario es hombre o mujer. Si es hombre, trato de que sea algo sobrio, una buena bolsa de papel con algún color no muy llamativo, el regalo en un prolijito paquete de papel de seda de un color acorde. Si es mujer, por lo general es una linda bolsa, con algún bonito diseño y colores alegres, o metalizada, según la persona, y dependiendo de la época del año, puede tener papeles arrugados asomando o unas lindas flores perfumadas, como las fresias. Puede que el envoltorio cueste más que el regalo, pero es increíble como cambia las cosas.

Hasta ahora hice varios regalos que me llevaron un lindo trabajito armarlos, y que me gustó mucho regalarlos.

Uno fue una linda taza con su posataza, en una caja con forma de caja de sombreros y un moño muy lindo, todo eso ya venía "de fábrica", pero le agregué un toquecito que quedó muy bien, unos pétalos de esos que venden en esas casas de decoración de cosas muy bonitas, carísimas, donde entro a chusmear y robar ideas, perfumadas con mi perfume preferido, bien distribuídas dentro de la cajita, en la taza, por todos lados. La taza quizá quedó un poco inutilizable con tanto perfume, pero una lavadita y quedaba joya, y además quedó tan lindo todo que me daba cosita regalarlo :P

Otro regalo fue con un poco de ingenio, consistía en una linda carta, algo de material de lectura, algo dulce para disfrutar de la lectura, todo en paquetitos separados y numerados, y un bonito sobre que decía algo como "leer primero" afuera y contenía las instrucciones para disfrutar del regalo, onda "abra el paquete A, pruebe uno de sus elementos, ciérrelo y abra el paquete B, comience a ojearlo, mientras disfruta de algunos elementos del paquete A." y así seguía.

Otro fue pensado para la ocasión. Una amiga, más que amiga, hermana del alma, se fue a vivir afuera, y de despedida le compré a ella y al marido dos cuadernos con espiral de esos tipo organizador, muy lindos, un par de lapiceras y señaladores de metal, y le escribí a cada uno una cartita en la primer hoja de lo que iba a ser un "cuaderno de viaje", y se los di en el aeropuerto con la indicación de abrir los paquetitos en el avión.

Este es uno que hice a las apuradas y con pocos fondos. Fue para el día del niño, y me invitaron a un asado de celebración, en el que iban a estar un montón de niños "reales", no como yo, que estoy más para inmadura que para niña :P. Compré una bolsa de papel bien grande y la llené con chupetines, juguetitos de esos de cotillón y un kit de globología. Guardé el kit de globología en la mochila y cuando llegué los hice ponerse a todos en fila (a los niños, se entiende), meter una mano en la bolsa y la consigna era "se quedan con todo lo que puedan sacar con una mano". Fue de verdad muy divertido, por suerte son unos chicos fantásticos, les encantan esas cosas, y no solo se divirtieron y me mostraron que las manos de los niños pueden agarrar muchas cosas, sino que después empezaron a intercambiarse juguetitos. Y el broche de oro fue la globología.

De verdad me encantaron esos regalos, me gustó mucho el proceso de pensarlo, conseguir las cosas y armarlo, y mucho más la sorpresa de los destinatarios al recibirlos, porque lo más lindo de hacer un regalo es ver que la persona que lo recibe se alegra de verdad, no creo en los regalos para cumplir, en los regalos caros, siempre busco algo que guste y que se pueda disfrutar.

El problema se arma cuando hay que regalar algo a alguien que o no conocemos o conocemos muy poco, o por más que los conozcamos, no nos podemos hacer la idea de qué puede gustarles. Es ahí cuando caemos en lugares comunes, como "y.... trabaja de tal cosa... entonces esto es un lindo regalo" o "es mujer, con una carterita zafo".

Una vez conocí a una chica que me dijo que la madre le dió dos consejos muy valiosos. El primero "cuando veas algo lindo, compralo y envolvelo para regalo, nunca se sabe cuándo vas a tener que usarlo, y si se te presenta la oportunidad, sacás al toque el paquete y quedás como una diosa". Y la verdad que me funcionó, una vez compré un par de remeritas muy lindas que a mi me iban a quedar demasiado feas, y las tenía envueltas, cuando llegó el momento, una bolsita y unos papeles de seda y quedé joya. Otra vuelta zafé con unos llaveritos del barrio chino. El otro consejo valioso va al final del post.

Hay cosas difíciles de usar de regalo, especialmente cuando no conocemos a fondo a la persona o no nos dió pistas, como las que nos pueden dar en una charla sobre música, libros, películas, con un poco de ingenio estas charlas son salvadoras, pero si no logramos sacar la información que necesitamos, no es conveniente optar por este tipo de regalos, probablemente no gusten mucho, o sean cosas que ya tienen.

También me pasó de regalar cosas que no gustaron, cosas que me llevaron trabajo y le puse mucho cariño, imaginándome que me las regalaban a mi, y cuando se lo di a la persona agasajada dijo "gracias" y ni lo abrió, lo dejó a un costado y el asunto pasó al olvido. Esa vez me sentí mal en serio, como que había invertido tiempo y ganas en regalar algo y fue todo al divino cohete.

Y ustedes, cuando regalan algo, cómo lo resuelven? Se encuentran con los mismos problemas que yo? Cópense y cuenten :)

Y no me olvidé del segundo consejo valioso, es solo para mujeres, pero con un pequeño cambio se puede adaptar a los hombres: lleven siempre una bombacha limpia y en buenas condiciones en la cartera, nunca se sabe si van a tener que ir al médico de urgencia, y estaremos a la miseria, pero al menos con los calzones limpios. O quizá los necesitemos por algún motivo más agradable, no? :)

Fin del post.

23.10.05

Te leo, me leés?


Estuve pensando (uf, sonamos), y me quedó picando una pregunta que alguno de "mis lectores" (ja, ahora soy un diario!!!) me ha dejado. Perdonen que no diga quién, pero no me acuerdo en qué post fue, ni quién lo comentó, ni las palabras exactas, o hasta puede ser que haya entendido otra cosa, pero estoy con ataque de fiaca a nivel general, de esos que hacen desear tener un control remoto que haga todo: cerrar la puerta, abrir la ventana, apagar el televisor, la luz de la cocina, traerme el inodoro y un biombito, acercarme un vaso con algo para tomar, matar al mosquito que me zumba en la oreja derecha, rascarme la ceja izquierda, calentarme la bolsita de gel para ponerme en la espalda, hacerme un masaje y traerme al morochazo que se parezca mucho al de la foto (si es el de la foto no me ofendo), me apantalle y me cuente chistes mientras ceba unos mates.

Pero bueno, la cuestión es que la pregunta, o la idea de la pregunta, me quedó picando...


Por qué leemos los blogs de otros?


Y pensé mucho (para pensar nunca me da fiaca), y llegué a la conclusión de que esto de leo un comentario no anónimo y visito el blog del que me comentó el post, y ya que estoy, comento alguno de sus posteos, bueno, este trabalenguas no es ni más ni menos que un diálogo diferido, tipo los almuerzos en la oficina, que uno tira un tema contando algo, y todos los demás se enganchan contando algo relacionado, o parecido, hasta que sale un nuevo tema.

Suelo hacer esto, y a veces también visito el blog de alguien que hizo un comentario interesante en el blog de otra persona, y si me engancho, también comento, un poco para dejar mi impresión y otro poco con la esperanza de que digan "uh, y esta chiflada de dónde salió? a ver...." y vengan a ver mi blog.

No es que sea exhibicionista o muera porque alguien lea mis ideas y delirios, sino nada más que para agregar más gente a esta charla diferida.

Suena a que puse un aviso con mi dirección diciendo "escríbanme!", pero es diferente, porque si alguien se va a enterar de mi espacio y va a venir a tomarse unos mates acá, es porque o se enganchó con un comentario mío, o llegó por leer algún blog que me resultó interesante, y eso deja fuera a la "gente que busca gente", me explico? Publicar un aviso que diga "Salitou, morocha, 1,70, 95-60-97, ojos verdes, 25 años, golosa", además de estar mintiendo (bueno, la primera y la última son verdaderas), estaría invitando a otras cosas, mi objetivo es pasar el rato y dejar que la cabeza de vueltas y vuele un poquito, y alguien esté de acuerdo o no con lo que digo, y por ahí cuente una anécdota, o algo parecido, como en los almuerzos de la oficina.


Hasta ahora tomaron mate conmigo Sinda, Damián, Malizia, Josie, Mauro y Nachitous. No quería dejar pasar la oportunidad de mencionarlos, a lo mejor alguien se copa y va a tomar unos mates con ustedes (recuerden que son mates virtuales, así que a no quejarse si no lleva bizcochitos de grasa, ok?). También vino muchas veces anónimo, pero no me cae bien la gente que escribe algo y no firma, o que llama por teléfono bloqueando el ID, hasta me molesta cuando me llaman, atiende el contestador y no me dejan el mensaje, nonono, a los anónimos no les convido mate. Y tampoco a esos que me dejan propagandas y me dicen "Hey! you have a great blog here!" y cosas por el estilo.

Chau. Fin del post.


14.10.05

Preocupantes mutaciones


Estaba leyendo una nota sobre la mosca de la fruta (Drosophila melanogaster) y la nueva versión que están desarrollando acá, en Sudacalandia. La mosca de la fruta es un bichito que siempre me llamó la atención, cuando estudiaba biología, o era escherichia coli o este insecto.
Ahora bien, si me vienen siguiendo y recuerdan mi post de Persiga la Vaca (o tienen ganas de leer lo que está archivado), me empezaba a preocupar el tema de las palomas que comían vacío, y lo preferían a las migas de pan. No estaremos creando a los que van a destruirnos en el futuro?
Si nos ponemos a pensar, la nueva versión de mosca está irradiada con rayos gamma, los mismos que convirtieron a David Banner (no el que hacía los carteles) en el increíble y verdoso Hulk. Y si un día la mosca se enoja, crece, se pone verde y se le da por cagarnos a frutazos desde arriba del árbol? Se imaginan un ejército de moscas marchando por parques y plazas, trasladando cajones de fruta y atacando a cuanto transeúnte desprevenido pase debajo de ellas.
No es suficiente con esquivar los regalitos de las palomas, también tendremos que esquivar manzanazos, naranjazos, uvazos, se imaginan un melonazo en la cabeza cuando cruzan la 9 de Julio? Ni hablar de una sandía.
Y para colmo de males, también tendremos a las palomas carnívoras, que ahora se contentan con los pedazos de vacío que les tira la gente que come en Persiga la Vaca, pero... y si Persiga la Vaca es clausurado? No debe haber nada peor que una paloma con sindrome de abstinencia de carne.

Y después me vienen con el problema del calentamiento global....

12.10.05

Diario no tan íntimo


Qué es en realidad un blog?

Pensaba eso en el bondi de vuelta, teje que teje al crochet (mi nuevo hobbie).

Tengo uno, pero la verdad, ni idea de qué es, y calculo que debe haber tantas respuestas como blogs hay en el mundo.

Para mi, es algo así como la etapa intermedia de un diario íntimo, cuando descubriste que alguien lo lee, y empezás a cuidar un poco lo que escribís.


Todavía me acuerdo de mi primer diario íntimo. Primero y último, todo junto, nunca superé que me lo leyera toda la familia.

Era blanquito, con dibujos infantiles, y dibujitos en las hojas. Tenía un candadito, de esos que se pueden abrir con un clip para el pelo, una auténtica barrera de seguridad.

Empecé como veía en las películas, escribiendo como si le hablara al encuadernado. Después, dejé de hablarle para hablar al aire, como esas cosas que uno escribe sin pensar que alguien va a leerlas. Pero no era así.

Un buen día mi madre, que respetó siempre mi privacidad de forma que creo que mis primeras nociones de encriptación se las debo a ella, me dice "no me gustó lo que escribiste ayer en tu diario (ayer? cuánto hace que lo leés?), me pareció de mal gusto y no quiero que pienses de esa forma"

Chan. Re chan. Mi mundo privado tenía espectadores.

Empecé a escribir en código, y se me fue la mano, tanto que a veces ni yo entendía lo que había escrito.

Un buen día, mi hermanito en medio de una pelea me empezó a cargar repitiendo frases de mi diario. Recontra chan.

Mi mundo privado no solo tenía espectadores, sino que había función diaria y batía records de audiencia. Poco a poco dejé de escribir ahí.

Después, crecí, y empecé a escribir en hojas sueltas, letras de canciones (para no perder la costumbre de la codificación), hasta que tuve un período de ausencia de inspiración, y cuando vuelve y escribo algo, busco la carpeta donde la guardaba y nada, no estaba por ningún lado.

Empecé a transpirar frío, puede ser que después de tanto tiempo sigan intentando espiar lo que hay en mi cabeza?
Le pregunté a mi madre, en esa época no nos llevábamos muy bien, y me respondió "y yo cómo voy a saber?". Le pregunté a mi padre: "ah, si, la tengo yo". Me la das?

Y fue así que esa carpeta fue conmigo al trabajo al día siguiente, y me siguió de trabajo en trabajo, hasta que finalmente pasó al olvido y se perdió, en alguna mudanza, en alguna limpieza de escritorio.

Quizá esta compulsión que tengo para escribir aunque no tenga nada interesante se deba a esa ausencia. Siempre quise eso de tener "mis diarios íntimos" como para recordarme momentos, especialmente de mi infancia, de la que guardo algunos recuerdos y pocas fotos.

En fin...

Fin del post.

10.10.05

El tiempo se va


Si. Se vuela.
Puse que no iba a escribir por unos días, y acá estoy, dele que dele con las teclas. Mi hermano se queja porque dice que el ruido de mis digitaciones se escucha por toda la casa, y parece una ametralladora.
Pensaba tomarme un tiempo con lo de los peces, pero justamente el tiempo se vuela, se va sin que nos demos cuenta, y si nos damos cuenta, no podemos hacer nada al respecto.
Ayer fui a la Feria de Pompeya, originalmente llamada Feria de los Pájaros, pero se pueden conseguir hasta cactus ahí adentro.
Tenía que comprar un aireador para reponer el que se me había quemado, un termómetro para reponer el que se me rompió, y de paso ver qué onda y distraerme.
Me compré un aireador pulenta pulenta, una bestia, dos bocas, sopla tanto que mi pecera está llena de burbujas arriba, bah, más que burbujas tiene espuma (se me fue la mano con el acondicionador de agua), si no fuera porque le puse valvulitas a las mangueras, más que pecera iba a ser una batidora de peces.
Cuestión que me puse a mirar, y renació mi amor por los peces bigotones que suelen andar en el fondo, y no pude resistir, y decidí armar la pecera como había pensado originalmente, antes de que los bonitos carassius de colores llegaran a mi vida.
Y compré, un cardúmen de coridoras (ocho, más una de yapa, más una chanchita que se metió en el medio cuando pasaba la red), cinco otocinclus para reponer mi cardúmen, de diez en total, y paré la mano, no sea cosa de que mi querido ancistrus se vea invadido por tanto pez bochinchero.
Llegué a casa, y me puse a esperar a Valeria, que estaba de visita con su familia, mientras pensaba qué iba a hacer con tanto pez.
Vale no llegó, y decidí empezar de cero, es decir, desarmar toda la pecera, limpiar todo y volverla a armar. Y flor de trabajo, terminé a eso de las tres de la mañana, con la espalda partida de acarrear tanto balde lleno de agua.
Y puse a los peces, y me senté a ver una peli que tenía que devolver hoy: Big Fish. Todavía no se si tenía ganas de verla por el título, o porque es una peli de Tim Burton.
La cosa es que no podía evitar que mi ojo derecho mirara la pecera, mientas mi ojo izquierdo trataba de ver la película, y al final me quedé dormida en el sillón, dejando mi mejilla a merced de los mosquitos.
Me fui a dormir, léase, dejé todo tirado como estaba y me fui a dormir, pensando levantarme temprano hoy, acomodar el zafarrancho de baldes, mangueritas, trapos de piso y artículos para pecera que adornan cuanto espacio libre quedaba en mi living.
Me levanté a las doce, y me puse a hacer limpieza... en la pc.
A eso de las cuatro y media me atacó la indecisión: limpio todo y me pongo a ver la peli? Limpio las dos peceras de los caracoles y me pongo a ver la peli? Me voy a dormir la siesta y no limpio nada y no veo la peli? Al final, armé una maceta con una plantita bonita que me regalaron, y me senté a ver la peli porque la tenía que devolver a las nueve.
Y entre interrupciones telefónicas varias, parada para hacerme un capuccino, parada para poner el pochoclo en el microondas (curioso, uno ve una peli donde la gente come pochoclo, y tiene ganas de comer pochoclo), y terminé de verla justo a las nueve.
Fui a devolverla y cuando volví me asaltó en la puerta la lista de cosas que no hice, porque el tiempo se me fue, y no se en qué, y encima estoy cansada como si hubiera hecho de verdad todo lo que pensaba hacer.
Saqué la basura, y aquí estoy, otra vez frente a la pc, escribiendo.
Menos mal que mi horario de sueño no existe, ahora si me pongo a ordenar un poco para que esto parezca una casa. Llegué a la conclusión de que esto de tener peces es como dicen, cuando empezás, no parás, tengo una pecera con una mezcla de lo que ya les conté, un carassius en una cuba de 30 litros, esperando a que arme su definitiva casa de 480 litros, y dos peceras con caracoles y plantas varias, más un tupper bien grandote con crías de caracoles manzana. Creo que hay más agua acá adentro que en tanque del techo.
Les dejo todas las fotos del post al final, para hacer algo diferente nomás.

9.10.05

E! se fue al cielo

Hace un rato.
Tenía ganas de escribir varias cosas, pero las ganas se me fueron.
Puede que haga silencio por algunos días.
Chau.
Fin del post.

8.10.05

Flor de regalete

Corazones de mantecol (este post te lo dedico a vos negra):

Me disponía a ver la peli de Vin, cuando suena el teléfono. Pensé que era mi señor padre, que hacía un rato había estado peleándose con el firewall para instalarlo. Levanto el tubo y del otro lado de la piola suena la dulce voz de mi amiga Gaby, diciéndome "feliz cumpleaños negra", como si estuviera acá al lado mío.

Y está, pero no físicamente, en este momento está en Calgary, provincia de Alberta, en Canadá. Y qué les puedo decir... la escuché y se me aflojó la rodilla derecha, como digo habitualmente cuando algo me emociona, me hice pis.

Y hablamos, mucho, de todo, hicimos planes, hablamos de películas, de facultad, de cuánto me sale el güindous, del Tomb Rider, de otros juegos, de la gente del grupo de la noche (cómo extraño esa época tan loca), que Don Gato, Walid, tantos nombres y tantos recuerdos... Hablé con su señor esposo (Dave, sos groso, sabelo :) ), y nunca había hablado con él, solamente habíamos chateado, y fue re lindo hablar con él. Y después hablé con ella otra vez, y así se nos pasó más de una hora parloteando y parloteando (fue una hora o dos negri?).

Y qué quieren que les diga, me encantó hablar con ella, y me quedó doliento la oreja por el tubo del teléfono, y la cara por sonreir todo el tiempo.

Quería compartir esto con ustedes corazones de mantecol, estoy re contenta :)

Y también les quería contar que si mezclan a ojímetro dos partes de mantecol picado y una de coco rallado (o miti y miti) en una cacerolita a fuego suave, o a baño maría si tienen miedo de que se queme, hasta que se haga una pastita, y hacen bolitas y las pasan por coco o por más mantecol picado, y ponen las bolitas en el freezer, sacan unos bombones de lujo.

Ahora me voy a ver a Vin y a cenar tardíamente. Si, dos y media de la mañana y yo voy a cenar, es que esto de no tener horarios y hacer las cosas cuando tengo ganas me encanta :)

Muchos besos

7.10.05

Un día al divino cohete?

Si, es lo que piensan, un día al divino cohete es un día al pedo, pero decir al pedo no me gusta, al divino cohete queda más bonito.

Hace mucho que no escribo, pero no es vagancia, pasa que tenía el ánimo por el piso, con esto de que mi pez no mejora y me acuesto a cualquier hora, y ayer fui a ver a un amigo cuya hermana ya empezó el gran viaje al cielo (ayer mismo, sisisi), y no estaba muy de humor como para escribir algo con la onda de siempre.

Pero llegó el viernes, y todo cambió. Hoy fue un día de esos en los que se hace poco pero se disfruta mucho. Me refiero al trabajo.

Empecé como siempre, con cara de ogt, pero la onda de mis queridos compañeritos me cambió la cara en pocos segundos (gracias Ale, Damián, Pablo, de verdad que da gusto estar el tiempo que estoy con ustedes).

Hablamos de muchas cosas, y como pasa siempre, uno cuenta una anécdota, y todos cuentan anécdotas relacionadas con el tema de la primer anécdota, y así fue que hablamos de los jardines de infantes y la etapa de adaptación (la mía fue estar en penitencia todo el día en un rincón porque no paraba de llorar, re pedagógico), y otros temas que en este momento no recuerdo (si, como Dory, tengo problemas con la memoria de corto plazo).

Fue muy gracioso. Después nos fuimos a almorzar a Persiga la Vaca, y tiramos migas a las palomas, y a un gorrión que Pablo bautizó Junior. Había una paloma medio punk, con las plumas paradas, que era la que más migas agarraba. Intentamos con proyectiles de migas directo a su cabeza, pero ella o el las esquivaba y agarraba más migas. Después les tiré un pedazo de vacío, para ver si mi teoría sobre la futura raza de palomas que se alimentan con carne era cierta, y comprobé que las palomas prefieren el vacío a las migas. Preocupante, me voy consiguiendo el cerco electrónico.


Después volvimos y nos dimos un rato de sol en el cantero y continuó el Proyecto Piedrita, y luego a la oficina.

Era un desierto, descubrimos que la mitad es productiva y la otra mitad se rasca a cuatro manos, y nosotros en el medio, hoy tirando más para la mitad que se rasca a cuatro manos.

Como estaba haciendo unas consultas pesadísimas, de esas que tengo que esperar por laaaargos minutos (hoy horas), me dediqué a webear, y encontré un sitio donde describen cómo hacer una ganzúa electrónica con un disco rígido y un mouse. Como se usa el disco rígido para producir una vibración, y me parecía engorroso eso de andar con una batería, una fuente y el aparatejo, me puse a pensar en algún otro adminículo portatil que vibrara y usara pilas, y lo único que se me venía a la mente era eso en lo que seguramente están pensando, pero ahí salió Pablo en mi ayuda y sugirió el adminículo ideal "un cepillo de dientes a pilas". Grande Pablo, con esa y tu anécdota del día que se te prendió fuego la mochila hiciste el día.

Más tarde, necesitabamos una abrochadora, y como el aburrimiento alargaba las horas de una forma increíble, y la abrochadora estaba en un cajón con llave de alguien que no estaba, y habíamos analizado el tema de las ganzúas, decidí hacer algo por el estilo, pero justamente, con estilo.

Así que saqué mis destornilladores (toda lady que se precie debe llevarlos en su cartera/bolso/mochila), puse mi tono polifónico de Misión Imposible, y con el destornillador abrimos el cajón, sacamos la abrochadora, la usamos, la guardamos y cerramos nuevamente el cajón, hasta que terminó el tono. El tiempo fue justo, parecía de película, fue el momento de la tarde.

Y así, entre ideas varias de webs para pungas, se nos pasó la tarde. Salí de la oficina y me fui a adquirir enseres varios para mi nuevo hobbie (tejer al crochet), y volví a casa.

Para matar el tiempo, me alquilé dos pelis: Big Fish, me la debía, me encanta lo que hace Tim Burton (uno de mis peces lleva su nombre), y The Chronicles of Riddick, que también me la debía, me encanta Vin Diesel (no de la misma forma que Tim Burton).

Gente, me voy a ver pelis.

Fin de este post. Besos y buen fin de semana.

5.10.05

Me contó un cordobés


El Coco me dijo que pusiera esta frase, "me contó un cordobés". Y bueno, el Coco es cordobés, y me contó algunas cosas :)

Una vez me contó que llovía y cantaban las ranas. Y automáticamente me acordé de mis épocas de lectora de Lovecraft, y que me llamaba la atención eso de "cantaban las ranas y las
chotacabras". Alguien vió alguna vez una chotacabra?

Yo no, pero me puse a buscar fotos para poner en el post, como hago habitualmente, y busqué coco, y encontré

Y me cansé de buscar. 46 páginas de fotos de coco. Así nunca voy a develar el enigma del coco, y mucho menos si no se cuál es ese enigma.

Lo raro es que no encontré nada del coco que asusta a los chicos, tuve que poner cuco para encontrar algo.

Coco, te dedico este post, a ver si nos contás cuál es tu enigma, y nos ayudás a resolverlo :)

No nos vas a asustar, no?

Fin el post, chau.

2.10.05

Objetos voladores no identificados... y empanadas


Hola gente:

Como habrán notado en
Proyecto Piedrita, hoy trabajé. Qué tiene de raro, si ya trabajé todos los días de la semana y en todos los horarios. La verdad, no se qué tendrá de raro, a lo mejor que hacía mucho que no lo hacía.

Jejeje, hacía que no lo hacía :P.

El tema es que no dormí, porque supuestamente entraba a trabajar a las siete, y como me había levantado a las nueve y tenía que darles el remedio a los peces a la una, si me acostaba no me levantaba nadie a las seis. Así que preparé mi capuccino instantáneo y me dispuse a pasar la noche.

Me iban a llamar a las seis, pero algo salió mal, y se corrieron todos los horarios, y me llamaron a las nueve y media. Fui a la oficina, volví, y tengo que darle el remedio a los peces al a una, y estoy que me caigo de sueño.

Así que decidí cocinar, para no dormirme en la silla. Y abrí la heladera y encontré lo mismo de siempre: nada. O mejor, restos de comidas anteriores. Y había tapas para empanadas, y decidí improvisar.

Hice dos ovnis con hamburguesa, tomate y arvejas cada uno. Pensé que iba a ser un asquete, pero no, estaba de lujo, en serio. El otro ovni es más raro, tenía un poco de arroz de ayer, con coco rallado (me encanta), así que hice empanadas de arroz con tomate y arvejas. Les dirán ovnis porque cuando uno los mira dice "y esto que mier** es?", no se, igual ahí me falta la parte voladora, que quizá sea cuando te los tiran por la cabeza. Anyway, cuando se me terminó el arroz me sobraban tapas, así que el resto de las empanadas fueron de tomate, arvejas y queso rallado.

Suena asqueroso, pero la verdad es que no estaban nada mal, y ya tengo mi almuerzo de mañana.

Bueno corazones, me caigo en serio de sueño, y de la silla, así que me voy a seguir haciendo tiempo frente a la tele, que me estupidiza y me obliga a no usar la cabeza, a ver si así descanso.

Abrazos desde lo más profundo de mi blog.

1.10.05

El faro


Y ahora que escribo? Esta compulsión por escribir acá mi diario (como si alguna vez hubiera creído que los diarios sirvieran para algo), tengo ganas de escribir, pero no se me ocurre de qué. Ah, ya se.

Me levanté hace un rato. Si, me pasé el día en cama, almorcé en la cama, porque si.

Creo que a las cuatro de la tarde prendí la tele, pero pasó algo extraño. Entre sueños, me pareció ver un documental de faros, había uno que tenía dos plantas, la de abajo era cuadrada, y la de arriba era octogonal, después aparecían unos tipos fundiendo cobre para hacer una estatua grande, al costado había un pie de cobre enorme. Después, un tipo explicaba de técnicas de construcción antiguas (decía algo de la composición de la arena, que era muy blanca y finita), y que en la zona no había no se qué materiales, por eso las paredes eran tan anchas, y me decía "ves?"

Y zaz, dejé de estar en mi cama, y aparecí en medio del documental del faro, y hacía calor, y el tipo me explicaba que cuando empezaron a usar la estructura de no se qué cosa y el concreto empezaron a hacer pareces más finas. Y seguía con los materiales que usaban de combustible para mantener la llama del faro encendida, y yo veía a los que hacían todo eso, y la verdad es que estaban vestidos de forma rara, tenían túnicas, pero cortas, se les veían las rodillas, y estaban descalsos, y tenían pelo largo. Y después salíamos del faro, y nos lavábamos las manos en un piletón que tenía muchas canillas, como el piletón de la escuela donde hice la primaria, nada más que este piletón estaba en medio de un desierto.

Entonces sonó el teléfono, y me tuve que despertar. Miré la tele esperando ver el National Geographic Channel, alguno de Discovery, pero no, estaba mirando Utilísima.

Que loco no? Me puse a buscar en internet, y mi faro se parecía muchísimo al de la foto, nada más que no estaba terminado.