24.10.05

El regalo perfecto


Qué regalamos cuando regalamos algo?

Les cuento que para mi lo de regalar algo es un trabajillo, y además me gusta. Por lo general trato de imaginarme qué le podría gustar a la persona, conociéndola un poco, viendo cómo es su ambiente, su ritmo de vida, de todo un poco, y cuando voy a comprarlo, trato de pensar en esa persona y buscar lo que a mi me gustaría si fuera esa persona, y que se ajuste al bolsillo por supuesto :P

Otra cosa muy importante también es el envoltorio, y acá depende de dos factores clave: el destinatario es hombre o mujer. Si es hombre, trato de que sea algo sobrio, una buena bolsa de papel con algún color no muy llamativo, el regalo en un prolijito paquete de papel de seda de un color acorde. Si es mujer, por lo general es una linda bolsa, con algún bonito diseño y colores alegres, o metalizada, según la persona, y dependiendo de la época del año, puede tener papeles arrugados asomando o unas lindas flores perfumadas, como las fresias. Puede que el envoltorio cueste más que el regalo, pero es increíble como cambia las cosas.

Hasta ahora hice varios regalos que me llevaron un lindo trabajito armarlos, y que me gustó mucho regalarlos.

Uno fue una linda taza con su posataza, en una caja con forma de caja de sombreros y un moño muy lindo, todo eso ya venía "de fábrica", pero le agregué un toquecito que quedó muy bien, unos pétalos de esos que venden en esas casas de decoración de cosas muy bonitas, carísimas, donde entro a chusmear y robar ideas, perfumadas con mi perfume preferido, bien distribuídas dentro de la cajita, en la taza, por todos lados. La taza quizá quedó un poco inutilizable con tanto perfume, pero una lavadita y quedaba joya, y además quedó tan lindo todo que me daba cosita regalarlo :P

Otro regalo fue con un poco de ingenio, consistía en una linda carta, algo de material de lectura, algo dulce para disfrutar de la lectura, todo en paquetitos separados y numerados, y un bonito sobre que decía algo como "leer primero" afuera y contenía las instrucciones para disfrutar del regalo, onda "abra el paquete A, pruebe uno de sus elementos, ciérrelo y abra el paquete B, comience a ojearlo, mientras disfruta de algunos elementos del paquete A." y así seguía.

Otro fue pensado para la ocasión. Una amiga, más que amiga, hermana del alma, se fue a vivir afuera, y de despedida le compré a ella y al marido dos cuadernos con espiral de esos tipo organizador, muy lindos, un par de lapiceras y señaladores de metal, y le escribí a cada uno una cartita en la primer hoja de lo que iba a ser un "cuaderno de viaje", y se los di en el aeropuerto con la indicación de abrir los paquetitos en el avión.

Este es uno que hice a las apuradas y con pocos fondos. Fue para el día del niño, y me invitaron a un asado de celebración, en el que iban a estar un montón de niños "reales", no como yo, que estoy más para inmadura que para niña :P. Compré una bolsa de papel bien grande y la llené con chupetines, juguetitos de esos de cotillón y un kit de globología. Guardé el kit de globología en la mochila y cuando llegué los hice ponerse a todos en fila (a los niños, se entiende), meter una mano en la bolsa y la consigna era "se quedan con todo lo que puedan sacar con una mano". Fue de verdad muy divertido, por suerte son unos chicos fantásticos, les encantan esas cosas, y no solo se divirtieron y me mostraron que las manos de los niños pueden agarrar muchas cosas, sino que después empezaron a intercambiarse juguetitos. Y el broche de oro fue la globología.

De verdad me encantaron esos regalos, me gustó mucho el proceso de pensarlo, conseguir las cosas y armarlo, y mucho más la sorpresa de los destinatarios al recibirlos, porque lo más lindo de hacer un regalo es ver que la persona que lo recibe se alegra de verdad, no creo en los regalos para cumplir, en los regalos caros, siempre busco algo que guste y que se pueda disfrutar.

El problema se arma cuando hay que regalar algo a alguien que o no conocemos o conocemos muy poco, o por más que los conozcamos, no nos podemos hacer la idea de qué puede gustarles. Es ahí cuando caemos en lugares comunes, como "y.... trabaja de tal cosa... entonces esto es un lindo regalo" o "es mujer, con una carterita zafo".

Una vez conocí a una chica que me dijo que la madre le dió dos consejos muy valiosos. El primero "cuando veas algo lindo, compralo y envolvelo para regalo, nunca se sabe cuándo vas a tener que usarlo, y si se te presenta la oportunidad, sacás al toque el paquete y quedás como una diosa". Y la verdad que me funcionó, una vez compré un par de remeritas muy lindas que a mi me iban a quedar demasiado feas, y las tenía envueltas, cuando llegó el momento, una bolsita y unos papeles de seda y quedé joya. Otra vuelta zafé con unos llaveritos del barrio chino. El otro consejo valioso va al final del post.

Hay cosas difíciles de usar de regalo, especialmente cuando no conocemos a fondo a la persona o no nos dió pistas, como las que nos pueden dar en una charla sobre música, libros, películas, con un poco de ingenio estas charlas son salvadoras, pero si no logramos sacar la información que necesitamos, no es conveniente optar por este tipo de regalos, probablemente no gusten mucho, o sean cosas que ya tienen.

También me pasó de regalar cosas que no gustaron, cosas que me llevaron trabajo y le puse mucho cariño, imaginándome que me las regalaban a mi, y cuando se lo di a la persona agasajada dijo "gracias" y ni lo abrió, lo dejó a un costado y el asunto pasó al olvido. Esa vez me sentí mal en serio, como que había invertido tiempo y ganas en regalar algo y fue todo al divino cohete.

Y ustedes, cuando regalan algo, cómo lo resuelven? Se encuentran con los mismos problemas que yo? Cópense y cuenten :)

Y no me olvidé del segundo consejo valioso, es solo para mujeres, pero con un pequeño cambio se puede adaptar a los hombres: lleven siempre una bombacha limpia y en buenas condiciones en la cartera, nunca se sabe si van a tener que ir al médico de urgencia, y estaremos a la miseria, pero al menos con los calzones limpios. O quizá los necesitemos por algún motivo más agradable, no? :)

Fin del post.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Los regalos que me ha hecho Salomé, desde que nos conocemos... (1998) han sido impresionantes. En cada uno de ellos, me ha sorprendido enormemente y hasta emocionado.
Te quiero mucho hermanita.
Sindi

Don Kace dijo...

La verdad que regalar es difícil, en un mero “objeto” debemos decir al unísono, todo lo que la/lo conocemos, y cuan importante es para nosotros. Así que implica salirse de uno, ponerse en el lugar del otro y tratar de entenderla, me parece la parte mas altruista de uno, porque uno podría caer en el lugar egoísta y regalar cosas que a uno le gustaría (que le regalasen a uno). Cuestión que pierde todo el sentido simbólico de regalar (desprenderse de algo para darle a alguien que le va a gustar y servir)
En segundo lugar, pienso que a las personas que conocemos poco no habria que regalarle nada, no valen la pena…
[Es mas recuerdo un capitulo de Senfield, donde aborrecían a una persona que regalaba regalos, muy buen capitulo]

Anónimo dijo...

Hola, he entrado en tu blog, un poco por casualidad, porque andaba buscando cosas sobre globología, en fin, que me ha encantado lo que dices de los regalos. A mi también me parece importantisimo pensar en a quíen se lo vas a regalar y el envolverlo bonito, por cierto, que me has dado muchas ideas sobre esto, porque yo los envuelvo con papeles bonitos y les pongo lazos, pero eso de añadir flores me parece un detalle fantástico. Como anécdota, te contaré que yo tenía una amiga en el colegio que tenía un baúl lleno de regalos que su madre compraba para cuando era el cumpleaños de una amiga de ella o de sus hermanos y entonces elegían uno y se lo daban a quien fuera, cosa que por un lado me parecía muy curiosa y por otro no me gustaba, porque no resultaba un regalo tan personal como si te lo compraban de propio.
A parte, quiero añadir, que algunos de los regalos que más me han agradecido son los que he hecho a mano, que tampoco son muchos pero por ejemplo a mi novio le hice una especie de tarjeta, que dentro tenía otra tarjeta, pegada, y dentro otra, y así hasta 7, cada una de un color y más pequeña que la anterior, y con una foto nuestra y una palabra en el otro lado, y quedó muy bonito y le gustó tanto que lo tiene en su mesilla de noche.
Bueno, pues nada, que sigas haciendo regalos tan bonitos. Un beso. Raquel. Madrid.