Domingo

Arranqué tempranito el domingo, tipo cinco de la mañana. Arranqué del sillón a la cama, después de alimentar mosquitos unas cuantas horas.
El segundo arranque llegó a eso de las once, me di un lindo baño, me hice el desayuno, me puse a ver tele. Tipo dos de la tarde llegaron mis viejos. Me trajeron un bastidor gigante con pie, justito lo que quería, se parece al de la fotoMis tías me mandaron un llamador de ángeles un poco extraño: es una jaulita con cúpula, como la que dibujamos de chicos, dentro tiene dos pajaritos de plástico, cuelga de un resorte de estiramiento y tiene un aparatito en la base de la jaulita, que si le corro el interruptor, cuando salta por efecto del resorte imita el ruido de los pajarillos.

Nos fuimos a almorzar con mis viejos y mi hermano, parrillada para 2-3 que era una guasada, me traje el paquetito, todo regadito con un rico bivarietal, cabernet sauvignon-sirah, y después del atracón, frutillas de postre. Después, a dar vueltas por la ciudad. Pasamos por Ciudad Universitaria, no iba desde que se recibió mi hermano, hace como cuatro años, y él tampoco, así que entramos, dimos vueltas, recordé mi paso por los pabellones I y II, mi hermano recordó su estadía en el III, y volvimos. Pasamos por Recoleta, Barrio Parque, los lagos de Palermo, Canal 7, dimos vueltas por Recoleta, y entramos al cine. Vimos Fuerza Aérea Sociedad Anónima, todavía no entiendo cómo es que las aerolíneas internacionales siguen mandando aviones a Argentina, y decidí que a Europa me voy en tren o en barco.

Después volvimos, puse el asado en el freezer y mis viejos se fueron.

Yo esperaba un día de M**rd*, con todas las letras, pero la verdad, fue un día muy lindo.